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Italiano
authorName23242: Andrea Mishell Proaño Solis
Fecha: 25/02/2021
Email: info@viajeachina.com
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Nombre en chino: 丰都鬼城 (Pronunciación: Fēngdū Guǐchéng).
Precio de la entrada: 100 yuanes.
Tiempo sugerido de visita: De 2 a 4 horas.
Horarios de apertura: Desde las 7:00 am hasta las 17:30 pm (se dejan de vender entradas a partir de las 16:00 pm).
Dirección: Se encuentra al este de Chongqing a unos 160 kilómetros aproximadamente. En la orilla norte del Río Yangtze, en la montaña Mingshan, condado de Fengdu.
Mejor época para visitar: Primavera y otoño. También se puede acudir en marzo, del 3 al 5, debido a una feria anual que se lleva a cabo con varias actividades y programas dedicados a la temática del lugar.
Actividades populares: Caminar hasta la colina, recorrer sus templos, esculturas y entretenernos conociendo las leyendas chinas que envuelven el concepto de infierno. Fotografías del paisaje con bosques y montañas; así como de frescos que contienen formas y representaciones de demonios que es lo más llamativo y peculiar del lugar.
Fengdu es considerado como un complejo de templos, esculturas e imágenes en honor a la muerte y su paso por ella, es así también una de las ciudades con más encantos históricos y culturales de China, y se identifica como un lugar de descanso para las almas. Un conocido dicho es: “los espíritus van al cielo, y el mal va a Fengdu”, pues es aquí en donde a través de pruebas se permitía a los muertos separarse entre buenos y malos, éstos últimos recibirían el castigo pertinente por su reprochable accionar en vida. Existen muchas historias que relatan la belleza y memorias de este lugar, sin embargo, la más acogida y famosa es aquella que cuenta la travesía de dos miembros de la corte imperial quienes aburridos de sus actividades diarias, se dirigieron a las montañas de Mingshan y luego de varios años de taoísmo y autodisciplina, alcanzaron la inmortalidad; es así que se dice que incluso hasta nuestros días, ellos se encuentran mezclados con los demás turistas que visitan la zona. Único, ¿verdad? ¿Te atreverías a recorrer los pasajes de este destino turístico? Yo sí, acompáñame para conocer más acerca de él:
Si llegamos a Fengdu con el crucero por el Río Yangtze, lo primero que veremos será una pequeña aldea con varios templos y estatuas ligadas a demonios, lo cual ya nos da una impresión de todo lo sorprendente que vamos a conocer. Rápidamente seremos dirigidos a un camino que nos lleva hacia la cima de la colina y los demás templos, lo podemos recorrer caminando o podemos acceder al teleférico que nos llevará al tope en unos pocos minutos. El templo más turístico es el Palacio del Rey Infierno, donde encontraremos muchas esculturas y representaciones de la vida después de la muerte.
Se cree que la historia de Fengdu se remonta a la dinastía Han, entre los años 206 a.C y 220 a.C, en donde dos conocidos personajes, Yin y Wang, llegaron como monjes dedicados al taoísmo para posteriormente y a través de rituales y prácticas convertirse en inmortales según la leyenda china. Esto marcó la premisa para separar el bien del mal entre los muertos, pues traza un camino de pruebas para las almas en donde aquellas consideradas malvadas eran enviadas al infierno por su incorrecto accionar en vida.
Se convirtió en un cementerio taoísta, y durante la dinastía Tang, se lo reconoció también como un lugar para los muertos y el Rey del Infierno; dejando además una preciada enseñanza que destaca el valor de las personas buenas, pues son ellas quienes serán tratadas de igual forma de la mejor manera, mientras que aquellas personas malas serán castigadas después de la muerte.
Su historia data hace más de 2000 años y está estrechamente relacionada con demonios, fantasmas y la vida después de la muerte. La literatura ha jugado también un papel muy importante en los relatos de este lugar, pues éstas han hecho hincapié en Fengdu y han brindado una visión del mismo hacia los lectores y la población en general, dándole entonces ese toque de fama y encanto necesario para llamar la atención de muchos viajeros.
La narrativa comienza cuando Wang Fangping y Ying Changsheng, dos emblemáticos políticos durante la dinastía Han, deciden retirarse de sus funciones y dirigirse al monte Mingshan en busca de algo nuevo, diferente y alejado de la vida como la conocían; dedicados plenamente al taoísmos y a sus procedimientos, se dice que alcanzaron la inmortalidad gracias a su entrega y sacrificio. Posteriormente esta historia se hizo muy famosa en China, y sorpresivamente se dieron cuenta de que al unir el apellido de estos dos ex-funcionarios, Yan-Wang tiene una pronunciación muy similar a lo que traducido del chino significaría “Rey del Infierno”, por lo cual Fengdu empezó a ganar fama como un lugar misterioso lleno de leyendas, enigmas y espíritus.
Hoy por hoy, Mingshan es una isla conocida por ser un lugar que cuenta con más de 70 templos, mismos que fueron trasladados pieza por pieza después de la construcción de la Presa de las Tres Gargantas, para ser colocados en el lago artificial tras la presa. Dentro de ellos, podemos encontrar un sin número de elementos que abrazan el concepto de la muerte y los fantasmas, describiendo a perfección las torturas y sufrimientos que debían padecer aquellos que no se regían a los preceptos morales chinos y en cortas palabras eran considerados malos y no dignos de ir al cielo. Todo el lugar en general daba una sensación ciertamente desoladora y espeluznante, con calles vacías, tiendas sin visitantes y bloques de pisos, ahora dicha ciudad como lo habíamos mencionado, ya se encuentra bajo el lago.
También es interesante mencionar la creencia que se tenía acerca del alma en la dinastía Han, que es precisamente donde todo surge. Se pensaba que el alma de una persona estaba constituida por dos partes, una denominada hun y enteramente dedicada al espítitu, y otra conocida como po y con un antecedente más terrenal, misma que encontraba al alma espiritual a través de rituales y ceremonias especiales post-morten, sin embargo, había la posibilidad de hacerlo de otra manera para no tener que esperar la muerte, y era convirtiéndose en un ermita entregado a prácticas inusuales y elixires médicos para alcanzar la tan anhelada inmortalidad.
Dentro de este atípico lugar, podemos visitar ciertos monumentos emblemáticos con singulares nombres, por ejemplo: “Río de Sangre”, “El puente de la Nada”, “Pasaje de la Tortura” o “Torre de la última Mirada”, los cuales y según las creencias, son la entrada para las almas. En todo su recorrido encontraremos estatuas y representaciones artísticas que hacen referencia a la otra vida o al más allá, mediante demonios, fantasmas y obras un poco atemorizantes de lo que les sucede a quienes no han llevado una vida de bien.
Sin embargo, la atracción principal es el templo ubicado en la cima de la colina, a través del cual podemos encontrar una representación distintiva de las tres pruebas que las almas debían superar para ingresar al inframundo, éstas son:
Construido durante la dinastía Ming y considerado como la prueba entre el bien y el mal, pues cuenta con tres arcos de piedra idénticos por donde se debía cruzar bajo diferentes formalidades considerando el sexo, la edad, estado civil. Los demonios permitían el paso únicamente a lo bueno, mientras que el mal era arrojado bajo el agua del río. Si se pasaba el arco medio, significaba que el alma era buena.
En esta etapa, el Rey del Infierno realizaba un juicio a las almas que han atravesado el puente del desamparo. Alrededor existen 18 esculturas muy realistas representando a demonios feroces y creando esa sensación de inquietud en el ambiente.
Se compone por la puerta del templo y el palacio en sí, mismo que simboliza la atracción central del área escénica. Aquí la prueba consistía en permanecer de pie durante tres minutos mientras se encontraban encima de una piedra, solamente aquellos considerados como virtuosos eran capaces de cumplirla a cabalidad, en tanto que los dueños de un alma malvada fracasaban y eran condenados al infierno. Luego de esta tercera prueba, los espíritus pasaban a la Torre de la Última Mirada, donde veían por última vez a sus familiares y hogares antes de dirigirse a la otra vida.
Algo que intenta asemejarse a estas pruebas, son una serie de ejercicios físicos para quienes visitan Fengdu, por ejemplo subir las escaleras mientras se aguanta la respiración o atravesar el puente utilizando la menor cantidad posible de pasos, lo cual ahora pareciera algo divertido y gracioso, en realidad son prácticas inspiradas de tradiciones taoístas.
Asimismo, aquí encontramos una imagen acreedora de un Récord Guinness, por ser la mayor escultura tallada en roca con sus 138 metros de alto y 217 metros de ancho, se convierte en un punto referencial por su alta visibilidad desde cualquier ángulo de la ciudad, ésta se conoce como El Fantasma del Rey.
Finalmente, y algo bastante turístico, es una especie de casa encantada, en donde vívidamente y con colores de neón se muestran los temidos terrores del más allá, lo cual se acompaña con vendedores callejeros que ofrecen máscaras y detalles típicos de la zona. Esto atrae principalmente a los más jóvenes y atrevidos.
Al no encontrarse tan distante de Chongqing, se puede visitar esta ciudad y sus alrededores; lo más común y recomendable por su cercanía es la región de Karst de Wulong a unos 60 kilómetros de distancia, que ofrece magníficos paisajes entre naturales y primitivos; por otro lado tenemos también el Templo Shibaozhai, con su icónica pagoda piramidal a poco más de 100 kilómetros, y finalmente, la presa de las Tres Gargantas junto a las Tres Gargantas menores, que forman parte de uno de los proyectos más ambiciosos de China y del mundo entero.
Cabe mencionar que, la ciudad fantasma de Fengdu suele ser una famosa parada en los cruceros por el Río Yangtze, que permite observar varios templos en el lago artificial que se encuentra en la parte posterior de la Presa de las Tres Gargantas, pues la ciudad como tal después de esta construcción, quedó sumergida entre las aguas del río. Los cruceros se detienen en los muelles y normalmente transportan a los turistas tanto nacionales como extranjeros hasta la mitad de la montaña en un vehículo privado, y desde ahí se tiene la opción de tomar unas escaleras eléctricas que nos dirigirán directamente hacia el complejo de templos, o sino podemos caminar todo el sendero para llegar a la cima, todo dependerá de nuestros gustos y estado físico.
Existe un autobús que va desde la estación Chongqing Chaotianmen hasta el condado de Fengdu, luego se puede hacer un cambio a la línea local 109 o se puede tomar directamente un taxi para llegar a la Ciudad Fantasma.
Desde Chongqing se puede ir manejando, lo que tomará aproximadamente unas 2 horas y media.
La forma más usual para visitar Fengdu, es a través de los cruceros que van por el Río Yangtze, por eso se recomienda consultar y revisar si nuestro recorrido incluye la parada técnica en Fengdu. Caso contrario también podemos tomar un crucero especial desde el puerto de Chongqing hasta el puerto de Fengdu, lo que nos tomará unas 6 horas.
Fengdu, es un antiguo asentamiento que está atrayendo a propios y lejanos de todas partes del mundo, que desean más que conocer un bonito lugar, entender esa tan curiosa visión china del más allá.
Si te gustó saber de este lugar tan auténtico, peculiar y lleno de misterios, te invito a conocerlo; llévate varias sorpresas descubriendo su historia y leyendas, ya que es tan interesante ver como una percepción china se asemeja tanto a preceptos occidentales en cuestiones de la vida después de la muerte. Se puede pensar que es un sitio intimidante debido a su fondo cultural e histórico, pero no debemos olvidar que en tiempos pasados ésta también fue una zona para practicar el budismo, confucianismo y especialmente el taoísmo, por lo cual se puede respirar ese aire de paz y serenidad, lo que acompaña plenamente a los bellos bosques y paisajes naturales que también rodean el lugar.
Por eso y más, conozcamos la ciudad de Fengdu, pues tiene miles y miles de aventuras que ofrecernos, artesanías que resultan conmovedoras por quienes las realizan, construcciones arquitectónicas únicas y una lección permanente de que el bien es siempre premiado con bien, mientras que el mal será siempre castigado y sufrido. Nos vemos en la maravillosa Ciudad Fantasma!
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info@viajeachina.com 
Sala 814, Edificio B, No.15 jia1hao, Calle Jianguo, Distrito Chaoyang, Beijing, 100024 China. 
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